
A mi me gusta oler bien o, como digo yo oler rico,
siempre estoy pendiente de que si el jaboncito, el desodorante, la cremita, el
perfumito, el splas (no se si se escribe si, pero me refiero al agüita de
colores que huele rico y te colocas por todo el cuerpo después que te duchas o
cuando quieres refrescarte) etc; es tanta mi manía, que hay momentos en los
cuales el pobre Efrén le a tocado comer de mis menjurjes, sin contar como me
gusta el olor natural de El, de verdad que me vuelve loca sin necesidad de
perfumitos (por favor no sean picaros y no pidan explicaciones ;-P ).
Pero no solo me refiero al oler rico de esa forma, también
el oler rico me gusta en lo referente a la comida, de verdad que a mi parecer
la comida no solo entra por los ojos y por el gusto, también me encanta el olor
de una comida bien preparada, con solo contarles como me pongo cuando la mama
de Efrén nos invita a comer, y se abre el ascensor en el piso en que viven, de
verdad que es divino (de mas esta decirles que cocina riquísimo). Además de los
olores de la naturaleza, a mi en especial me encanta el olor que deja la lluvia
en la tierra mojada, el olor del mar, el de las flores, en especial el Jazmín
(no es nada personal, en serio jajaja).
Ahora bien, no tienen idea de lo duro que puede ser para
mi montarme en el metro en las tardes cuando salgo de la oficina, por favor no
me pidan que les describa los olores que encuentro en los vagones (sobretodo si
no tienen aire acondicionado), no sabría como explicarles, me basta con
decirles que en varias ocasiones he llegado a la casa, saludo a Efrén y me meto
en la ducha, para tratar de que con el baño se borre de mi nariz es experiencia
horrorosa.
Lo que me reconforta es que, realmente después de salir
de la ducha ya me olvido lo horrible del viaje con todos sus malos olores y me
siento renovada y oliendo rico de nuevo …